A pesar de haber previsto la mayoría de los problemas que podrían acontecer, siempre surgen imprevistos que desconocemos hasta que nos metemos en el ajo. Este es el primer videoclip que hacemos y a pesar de que nos podíamos desentender totalmente del tema sonido, pasamos por alto algo importante. Tal como habíamos previsto, necesitabamos grabar el video junto con el sonido proveniente del grupo para después poder sincronizar ambos en la edición. La primera idea era poner la música en el coche a todo volumen y ellos tocar al tiempo que la escuchaban. Descartamos el que tocasen de verdad ya que necesitábamos conectar amplificadores y demás y sólo teníamos la electricidad proviniente de los coches.El problema vino cuando empezaba a tocar la batería. No contábamos con el estruendo que montaba, con lo que en el momento que sonaba, nadie del grupo podía escuchar la música.Afortunadamente a Fernando se le ocurrió llevar unos altavoces autoamplificados conectados a un móvil a modo de reproductor y alimentado desde uno de los vehículos. Los altavoces estaban situados justo debajo del batería para que pudiese seguir el ritmo del tema musical. Aún así a veces no se escuchaba bien el sonido, pero por lo menos podían llevar el ritmo decentemente.
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