En primer lugar por grabar con niños, PACIENCIA, ¡esa es la clave!, trabajar con Manu, nuestro protagonista, implica unas cotas de stress inimaginables hasta ahora... él se toma todo como un juego, si le gusta bien, sino sencillamente para y se va.¡Y es capaz de dejarte colgado en mitad de una toma perfecta!. Sin embargo tenemos que decir a su favor que es un actor genial, se aprende el papel a la perfección, dice sus frases sin el más mínimo titubeo, de hecho hemos tenido muchos más problemas con los adultos que salen a su alrededor.
El segundo reto está en los efectos especiales... Tenemos varias tomas con croma para diferenciar claramente en el corto lo que es la realidad y el mundo de la imaginación del niño. ¡Facilíiiiiisimo!, pones una tela azul te mueves, lo metes en el ordenador y a positivar. ¡Dios mio! horas y horas de trabajo para colocar la tela, quitarle las arrugas, iluminarla correctamente, evitar que el niño al saltar sobre ella la descolacase... y luego en el ordenador se notan las arrugas, se nota la claridad del suelo, la ropa del niño es un desastre porque "quema la pantalla" y hay que repetir la escena... y el niño dice NO... y ... Bueno, dejo de aburriros con nuestros problemas. En exclusiva mundial las primeras fotos de "La trampa del ratón". Producciones Trípode sigue en la brecha.
