Una primera vista nos dice que lo grabado está bien, por lo menos en cuanto a enfoques, iluminación, color... y bueno, eso ya da un respiro. Luego, y al ser 2 cámaras, pues hay que llevar todo al Vegas y empezar la sincronización de ambas. Ahí es cuando se le empiezan a ver las cositas a la criatura. Que si este plano más cerrado, o más abierto, o un "que pena de movimiento en esta toma..." y ese tipo de zarandajas.
La ventaja principal es que las 2 cámaras eran exactamente iguales (canon XM-2) lo cual ayuda enormemente. Gracias a nuestro amigo Sebas que nos hizo el gran favor de dejarnos la suya.
En fin, supongo que hasta el fin de semana que viene no nos pondremos realmente a montar nada, simplemente terminar de sincronizar las 2 pistas de vídeo y el audio... y luego empezar a ver qué falla realmente. Esto todavía está comenzando.
También tenemos que grabar aún las escenas con nuestra actriz, ya que este sábado grabamos con el actor solamente. Poco a poco. Ya iremos contando los progresos...
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